Un equipo de paleontólogos españoles ha realizado un hallazgo singular en la localidad turolense de Ariño: se trata del esqueleto de tortuga prehistórica más completo encontrado hasta la fecha en Europa. Este descubrimiento, fruto del trabajo conjunto de expertos de la UNED y de la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis, aporta luz sobre la diversidad y evolución de las tortugas durante el Cretácico Inferior.
Los restos, pertenecientes a la especie Plastremys lata, datan de hace aproximadamente 110 millones de años y fueron extraídos en la Mina Santa María de Ariño. Hasta ese momento, los científicos tan solo conocían fragmentos de caparazones de esta especie, por lo que el hallazgo de un ejemplar casi íntegro supone un avance notable en el estudio de estos reptiles extintos.
Importancia de la Mina Santa María de Ariño
El yacimiento de Ariño ha saltado a la fama internacional gracias a este hallazgo, que no solo demuestra la presencia de dos especies extintas del grupo Helochelydridae en la zona, sino que proporciona uno de los registros fósiles más ricos de toda Europa respecto a tortugas del mesozoico. Estos reptiles forman parte de un linaje basal extinto, del que hasta ahora existían muy pocos restos bien conservados. El material recuperado incluye no solo el esqueleto casi completo, sino también fragmentos de otros individuos, incrementando el valor científico del lugar.
Repercusiones científicas del hallazgo
El análisis detallado del esqueleto ha permitido identificar características anatómicas desconocidas previamente en Plastremys lata. Este avance permite a los investigadores reconstruir con mayor precisión la morfología y adaptar el árbol filogenético de estas especies. Además, se amplía el rango temporal conocido de la especie, ya que estos son los restos más antiguos hallados hasta la fecha en el mundo y la primera vez que se localizan en la península ibérica.
Revisión taxonómica y nuevas aportaciones
El trabajo también ha servido para revisar el estatus del primer taxón de tortuga mesozoica descrito en España: Trachyaspis turbulensis, definida en 1957 tras el hallazgo de un ejemplar en Gargallo, Teruel. Tras su comparación con el nuevo material de Ariño, este ejemplar ha sido incluido dentro de Plastremys lata, aclarando una cuestión taxonómica que llevaba décadas sin resolverse.
Gracias a estos nuevos datos, la Mina Santa María de Ariño refuerza su posición como uno de los grandes referentes paleontológicos para el estudio del Cretácico Inferior y de la fauna que habitó Europa hace millones de años. Las investigaciones continúan, prometiendo seguir desenterrando pistas sobre la evolución de las tortugas y otros animales del pasado remoto.