Uno de los peces más hermosos de agua dulce es la mojarra azul, también conocida como mojarra luminosa o acara azul. Este pez, cuyo nombre científico es Aequidens pulcher, destaca por su vistosa coloración y comportamiento. Originaria de las cuencas de los ríos de Trinidad y Tobago, Venezuela e incluso Colombia, la mojarra azul se ha convertido en una de las especies más populares en la acuariofilia.
Origen y distribución
La mojarra azul habita en ríos y cuencas fluviales de América del Sur, particularmente en la Cuenca del Caribe, en la Cuenca del Catatumbo y en la Cuenca del Río Orinoco. Aunque es originaria de Venezuela y Trinidad y Tobago, hoy en día también es posible encontrarla en Colombia, en lugares como la Ciénaga Grande de Lorica.
Estas regiones están caracterizadas por aguas de temperatura tropical, comúnmente con una vegetación densa y aguas con niveles moderados de corriente. Su capacidad de adaptarse a diferentes condiciones del agua la ha hecho popular en los acuarios domésticos.
Características físicas de la mojarra azul
El cuerpo de la mojarra azul es de forma ovalada y robusta, con una boca protráctil que le permite capturar presas pequeñas con facilidad. Además de las tres espinas que tiene en la aleta anal, la mojarra azul presenta una rica coloración que la distingue de otros peces cíclidos: un tono azul verdoso con bandas transversales oscuras en su cuerpo y líneas azuladas que recorren sus mejillas.
Existen dimorfismos sexuales claros entre el macho y la hembra. Los machos, por lo general, presentan una coloración más intensa y pueden alcanzar mayores tamaños que las hembras. En cuanto a su tamaño, los machos pueden llegar a medir hasta 15 cm, mientras que las hembras suelen ser algo más pequeñas, alrededor de los 12 cm.
Hábitat y condiciones del acuario
Para que la mojarra azul prospere en cautiverio, el acuario debe replicar las condiciones de su hábitat natural lo mejor posible. A continuación, algunos parámetros recomendados para lograr su bienestar:
- Tamaño del acuario: Al menos 100 litros para una pareja.
- Temperatura del agua: Entre 24 y 28°C.
- pH: Levemente ácido a neutro, entre 6.5 y 7.5.
- Dureza del agua: 5 a 15 dGH.
El acuario debe tener suficiente espacio para nadar, ya que son peces activos, y plantas resistentes como Anubias o Microsorum. También es importante incluir rocas o troncos para que puedan esconderse y establecer su territorio. La mojarra azul tiende a ser territorial, especialmente cuando se empareja, por lo que se recomienda evitar colocar demasiados peces en el mismo espacio para prevenir conflictos.
Un punto importante es que estos peces producen gran cantidad de desechos, por lo que es esencial realizar cambios parciales de agua frecuentes (alrededor del 20-30% del agua semanal). Además, es recomendable contar con un sistema de filtración potente para evitar la acumulación de compuestos tóxicos como el amoníaco o los nitritos.
Alimentación de la mojarra azul
La mojarra azul es un pez omnívoro, lo que significa que en la naturaleza se alimenta tanto de materia vegetal como de pequeñas presas animales. En su hábitat natural, la dieta de estos peces incluye insectos acuáticos, crustáceos y pequeños peces. Sin embargo, en cautiverio es fundamental garantizar una alimentación variada para que mantenga su coloración vibrante y goce de buena salud.
- Alimento vivo: Gusanos de sangre, larvas de mosquito y artemias son buenas opciones.
- Alimento congelado: Artemia congelada, daphnia y krill.
- Alimentos comerciales: Gránulos o sticks específicos para cíclidos que sean ricos en proteínas.
- Componente vegetal: Espinaca, pepino o guisantes hervidos de vez en cuando para complementar su dieta.
Recuerda que no se recomienda alimentar a la mojarra azul exclusivamente con alimentos en escamas, ya que necesitará una dieta rica en proteínas para mantenerse saludable. Además, es aconsejable alimentar a estos peces varias veces al día en pequeñas cantidades para evitar la acumulación de residuos en el agua.
Comportamiento y compatibilidad
Aunque la mojarra azul es generalmente pacífica, puede volverse territorial, especialmente durante el periodo de reproducción. No son peces que suelen perseguir a otras especies, pero querrán defender su territorio de manera firme. En este sentido, si el espacio en el acuario es limitado, se pueden generar conflictos con otros peces.
En cuanto a la compatibilidad con otras especies de peces, la mojarra azul puede convivir con peces comunitarios de tamaño similar y comportamiento no agresivo. Algunas buenas opciones incluyen bagres Corydoras o peces Ángel. Sin embargo, debes evitar introducir especies pequeñas como tetras o guppies, ya que podrían ser percibidos como presas.
Si el acuario cuenta con suficiente espacio y escondites, las mojarras azules pueden convivir con otros cíclidos, siempre y cuando se respeten los territorios. Otra opción es mantener una sola pareja en un acuario dedicado solo para ellos.
Reproducción en acuario
La mojarra azul es una especie ovípara y relativamente fácil de reproducir en acuarios. Para que la reproducción ocurra, es importante que se forme una pareja. Al emparejarse, los machos y las hembras se mantendrán juntos durante todo el proceso de puesta y cuidado de los huevos y larvas. Durante la etapa de cortejo, el macho realizará movimientos vibrantes con sus aletas para atraer a la hembra.
Condiciones del acuario de cría
- pH: Neutro, entre 6.5 y 7.0.
- Temperatura: Mantener el agua entre 24 y 26°C para facilitar la reproducción.
- Acuario separado: Ideal tener un acuario de cría con al menos 40 litros.
Una vez que la hembra elija una superficie plana como una roca limpia, depositará sus huevos allí, y el macho procederá a fecundarlos. Los huevos eclosionarán entre 2 y 5 días después de ser puestos, y los alevines se alimentarán del saco vitelino durante unos días antes de empezar a comer alimento vivo como nauplios de artemia.
Cuidados de los alevines
Después de que los huevos eclosionan, tanto el macho como la hembra se encargan de proteger a las crías. El macho puede tomar a las crías en su boca para protegerlas en caso de peligro. Los alevines, tras consumir el saco vitelino, deben alimentarse con rotíferos o nauplios de artemia hasta que puedan alimentarse de pequeños gránulos o alimento comercial pulverizado.
Un aspecto relevante es que la pareja continuará protegiendo a los alevines durante las primeras semanas, hasta que los pequeños peces puedan valerse por sí mismos.
En definitiva, la mojarra azul es una especie fascinante tanto por su belleza como por su comportamiento. Aunque requiere ciertos cuidados específicos, su reproducción en cautividad y su actitud territorial la convierten en una elección excelente para acuaristas con algo de experiencia, que buscan un pez activo y peculiar para su acuario.