Suele suceder que te decides por poner un acuario completamente partiendo de cero y aparentemente en perfectas condiciones, pero a los pocos días notas que los peces se mueren. Esto tiene un nombre ya que es muy frecuente que suceda, se llama el ‘síndrome del acuario nuevo’, es extremadamente común en acuarios nuevos y para que no suceda hay que prevenirlo siguiendo unas pautas.
El fallo o causa, digamos, está en el envenenamiento por amoniaco. Los peces producen amoniaco en sus desechos, lo que es procesado por bacterias y convertido en nitrito. El nitrito y amoniaco son muy dañinos para los peces hasta en pequeñas cantidades. Un nuevo acuario no tiene estas bacterias vitales, por lo que el amoniaco se junta, eventualmente envenenando los peces hasta la muerte.
La solución, iniciar un ciclo en el acuario. Una vez instalado en acuario debe de ser abastecido con peces pequeños y resistentes para iniciar el proceso, también se puede tratar el agua con un producto diseñado para iniciar el ciclo en el acuario. Mejor introducir pocos peces pero resistentes para evitar el síndrome del acuario nuevo. Éstos actuarán como un suministro de amoniaco para las colonias de bacterias.
Es necesario que la introducción de los peces sea poco a poco. Nunca más de uno o dos peces por semana. Así las colonias de bacterias presentes en el tanque crecerán y se irán ajustando para soportar la cantidad en aumento de amoniaco introducida a la pecera. Es importante que el acuario esté limpio y se renueve el nitrato, para ello hay que cambiar entre un 10 y un 20% de agua semanalmente. Al limpiar el filtro no lo hagas con agua del grifo o productos como jabón, ya que esto puede matar a la colonia de bacterias e iniciará el ciclo de nuevo, limpiarlo siempre con agua del acuario.